St Aelred de Rievaulx (1110-1167)

Aelred nació alrededor de 1109 en una familia que vivía en el norte de Inglaterra. Un niño notablemente dotado, se crió en la corte escocesa con el hijo del rey. Amar, ser amado, esa era su naturaleza. Cuando comprendió que nada debía preferirse al amor de Cristo, entró en el monasterio de Rielvaux en 1135. A partir de ahora nada que no fuera sazonado con la sal de la Escritura de ninguna manera podría despertar su afecto.

San Aelred, el "Doctor en Caridad y Amistad"

Con gran dulzura en medio de sus hermanos, los superó a todos por su virtud. En 1143 fue enviado como abad a la fundación Rievaulx en Revesby, cerca de Lincoln. Cuatro años más tarde, la comunidad de Rievaulx lo eligió abad. Aelred quería que la gloria adecuada de su casa fuera, más que cualquier otra cosa, la morada de la caridad y la paz. De esta virtud que tanto le agradaba, debió de hablar con singular gracia en los tratados que nos dejó. El "Espejo de la caridad", y más aún, el "Tratado de la amistad espiritual", convirtió a Aelred en el "Doctor de la caridad", especialmente de la amistad humana, que conduce a Dios.

Durante los últimos diez años de su vida, sufrió fuertes dolores intestinales. A menudo, bajo la presión de esos sufrimientos, guardaba cama en una choza y los monjes iban a buscar a su Director para consolarlo; sentados en número de veinte o treinta de ellos conversaban cada día con él sobre la aprobación espiritual de las Escrituras y las observancias de la Orden. A su muerte, acaecida el 12 de enero de 1167, se pudo atribuirle el hermoso testimonio de que nunca, desde que tomó el hábito, se había puesto el sol en su alma, turbado por la falta de paciencia.

Aelred es parte de lo que a veces se llama la "primera generación" de escritores espirituales cistercienses, junto con San Bernardo de Claraval, el Beato Guillermo de Saint Thierry y el Beato Guerrico de Igny.

La Virgen María está particularmente presente en los temas principales de Aelred de Rievaulx

Estos son algunos de los grandes temas marianos tratados por san Aelred:

- Cristo Esposo "unió el alma de la Santísima Virgen a su divinidad" [1];

- La belleza de María [2];

- La Asunción [3];

- Mediación y maternidad espiritual [4];

- Oración a María Reina [5];

- Las primicias de la oración del Rosario [6],

- y por último, un texto lleno de sabor sobre la pérdida y recuperación de Jesús en el templo [7].